Punto final al conflicto laboral en la fábrica de Danone en Parets del Vallès (Vallès Oriental). La planta cerrará, tal como había anunciado la multinacional, pero la dirección ha aceptado mejorar las condiciones de salida de los trabajadores, que el sábado anunciaron una huelga de 10 días para presionar la compañía. El lunes por la mañana organizaron una protesta ante la feria Alimentaría —algunos empleados todavía tenían esperanzas de salvar la planta— y por la tarde la dirección cedió a las demandas de los sindicatos y se cerró el acuerdo que sella la marcha de Danone de Parets.
“La empresa quería cerrar, nos lo ha dicho en todas las reuniones, y nosotros hemos luchado por el no cierre, pero también hemos hecho una negociación basada en cuatro ideas, las prejubilaciones, los indemnizados, las recolocaciones y los que quisieran llevar a cabo proyectos personales”, ha explicado el presidente del comité de empresa, Jordi Barragan, en declaraciones a la Agencia Catalana de Noticias (ACN). Sindicatos y dirección han pactado poner fin a las protestas a cambio de un paquete de medidas para satisfacer las exigencias de los trabajadores, que incluye prejubilaciones en 33 empleados a partir de los 55 años, indemnizaciones por despido y el traslado de 37 empleados a la planta que Danone tiene en Aldaia (Huerta Sur), en el País Valenciano.

El comité de empresa, satisfecho con el acuerdo
El comité de empresa está satisfecho con el resultado de la negociación, que se cerró gracias a la mediación del Departamento de Trabajo después de una jornada maratoniana que duró todo el día, y está previsto que este martes se informe a la plantilla y miércoles se votará para ratificar el preacuerdo. “Teníamos un objetivo claro que venía del mandato de las asambleas anteriores, y nos hemos puesto firmes, no hemos rebajado nuestra propuesta y la empresa se ha ido aproximando, y por la tarde hemos conseguido el entendimiento que nos ha llevado a firmar el preacuerdo”, dice Barragan.