El ministro de Transición Digital y Función Pública, José Luis Escrivá, y la consellera de Economía y Hacienda de la Generalitat, Natàlia Mas, han acordado este lunes la creación de un grupo de trabajo por la creación de un proyecto de una planta de producción de chips en Cataluña, que se denominará Innofab. El encuentro, también ha servido para poner sobre la mesa el inicio de varios proyectos de tecnología cuántica, según ha informado la Generalitat en un comunicado.
Después de la reunión, Mas ha destacado el «espíritu de colaboración» porque Innofab sea un hecho. En este sentido, el gobierno español y el catalán quieren trabajar plegados para hacer de estos proyectos -que necesitan mucho conocimiento en nuevas tecnologías- una realidad. En cuanto a la financiación de producir chips en Cataluña ya se acordó en una reunión entre los presidentes Pedro Sánchez i Pere Aragonès hace aproximadamente un mes. Así pues, el comunicado de la Generalitat ha especificado que la planta de producción está valorada en 365 millones de euros, que se cofinanciarán con las ayudas de los fondos europeos Next Generation. La planta, que todavía no tiene fecha de creación, consistirá en un espacio de 2.000 metros cuadrados especializado a realizar prototipos de chips con materiales alternativos al silicio, que es el que actualmente se utiliza para fabricar este producto.

La tecnología cuántica, una asignatura pendiente
En la reunión, Mas también ha planteado al ministro la necesidad que los Next Generation cubran los proyectos existentes en tecnología cuántica y fotónica, dos de los ámbitos prioritarios para la Generalitat por su potencial impacto en la economía catalana. En concreto, el Govern tiene el proyecto de Vall de la Quàntica, con el cual se pretende crear un ecosistema de investigación, formación, atracción y retención de talento que permita crear nuevas empresas vinculadas a este ámbito.