La Integrated Systems Europe (ISE), la principal feria del sector audiovisual del planeta, ha dado la bienvenida a los visitantes de su edición del 2024 con un golpe de efecto. La entrada este del recinto Gran Vía de Fira de Barcelona, que acogió el acontecimiento durante toda la pasada semana, se presentaba en el mundo con un experimento técnico de primer nivel: la pantalla transparente más grande de Europa. Basada en la tecnología de la compañía tecnológica china Mixwave –que ya expuso sus productos en la anterior celebración del acontecimiento– la tecnología permite una proyección gigantesca para capitanear el acceso al certamen, manteniendo el carácter de la estructura de vidrio de Feria. El responsable de la ingeniería y el montaje de la estructura, pero, no es internacional. Es, de hecho, una de las empresas referentes de la industria no solo en Barcelona y Cataluña, de todo el Estado español. Se trata de Sono, compañía fundada en 1972, y que ha vivido al ISE 2024 un momento especialmente dulce. «Tenemos la pantalla; llevamos esta bandera y lo podemos explicar», declara a
Sono es el que se conoce como un integrador: explora el mercado y traslada a los clientes finales le soluciones audiovisuales que necesita, ofreciendo también los servicios de ingeniería, montaje y mantenimiento que acompañan cualquier apuesta tecnológica de esta medida. «Somos una rara avis a la ISE», explica Sabata: en un congreso de exposiciones tecnológicas, Sono se dirige a «un 20% de los visitantes, los compradores finales». La gigantesca pantalla que preside este año el congreso, de hecho, es producto de la exploración de ISE de la que la empresa barcelonesa –con sede a Cornellà, más concretamente–: Mixwave presentó su solución en el congreso del 2023, y allá mismo fue donde la catalana la descubrió.
«La dificultad –explica el directivo– rae a la ingeniería»: analizar y entender las estructuras que tienen que acoger las tecnologías que piden los clientes y hacer que pantallas, sistemas de só y otros productos encajen como es debido. La experiencia de Sono se nota por toda Barcelona: bajo su mando se ha instalado los videomarcadores del estadio de Cornellà-El Prat o del Palau Blaugrana, entre otros referentes del entretenimiento al país. La barcelonesa también ha sabido encontrar su espacio en mercados internacionales, con intervenciones al museo nacional catarí; así como en China, al pabellón España de Shangái. La experiencia, combinada con la fama que ya ha adquirido la compañía a un mercado relevante, pero no tan grande como el de la competencia, como es el del Estado español, ha convertido el stand de Sono en visita obligada para los compradores finales a la edición del 2024. La barcelonesa también sirve de contacto directo entre compradores y proveedores: «si mi cliente busca una pantalla muy específica que se expone a la ISE, sugiero que me acompañe lo vayamos a ver juntos», relata el COO.

Colaboración con ISE
La relevancia de Sono al panorama audiovisual español forma parte de la decisión de contar con su
Cambios tecnológicos
Con décadas de presencia al sector, Sono se ha mantenido como integrador en algunos de los cambios tecnológicos más destacados de la historia del audiovisual. En palabras de Sabata, pero, la adaptación en nuevas tecnologías no es un problema. «El adelanto es a nuestro ADN», declara el directivo. Así, la oferta a la cartera de la barcelonesa ha avanzado desde un sistema de proyección de diapositivas basado en tecnologías innovadoras hasta abrazar la realidad aumentada, la realidad virtual o –como demostrado a ISE– las pantallas transparentes. La del audiovisual, si bien es una industria marcadamente tecnológica, registra cambios a menudo incrementales, no disruptivos. Ahora bien, desde la experiencia de la catalana, «con perspectiva, cada año cambiamos mucho». «Pantallas LED, más resolución, más tamaño, características especiales», destaca el COO.
La pandemia, recuerda, supuso un cambio sustancial a una industria que ahora aparece en todas partes. «Nos hemos hibridizado, estamos acercando el audiovisual a la IT», argumenta Sabata. Para subir al carro de esta expansión, el directivo tiene una receta clara para el tejido empresarial barcelonés: crecer. Cómo en otros muchos mercados, Barcelona –y Cataluña– disfruta de una ancha diversidad de iniciativas, pero la mayoría de medidas más bien pequeñas. «Nosotros somos de las grandes» dentro del país, si bien no se pueden comparar en cuanto a dimensiones con competidores otros mercados europeos. En otros lugares, como por ejemplo Portugal, se empiezan a ver grandes inversiones para que empresas consolidadas hagan el salto, si bien la fusión o la atracción de capital extranjero pueden ser estrategias viables. «No sé cómo lo haremos; solo estoy seguro que tenemos que tener empresas más grandes», concluye Sabata.