El malestar en el mercado inmobiliario catalán parece afectar solo al segmento de alquiler. La compraventa, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística, se encuentra en su mejor momento en década y media. Después de haber revelado que Cataluña había cerrado septiembre con la cifra de adquisiciones inmobiliarias más alta desde 2007, el INE informa que se concedieron en el país en el mismo período 7.864 préstamos para comprar una vivienda, un 15,3% más que en el mismo período del año anterior. Es, tal como recuerda el organismo, el mejor septiembre en términos hipotecarios desde 2009, cuando aún se notaban los efectos de la burbuja inmobiliaria que había estallado unos meses antes.
El aumento del costo de la vivienda y las mejoras en las condiciones de financiación -con un Euríbor en mínimos alrededor del 2%- también han servido para elevar los importes prestados. Tal como consta en las cifras del INE, las entidades de crédito entregaron a sus clientes 1.470 millones de euros, casi un 30% más que hace un año; con una media por contrato cercana a los 187.000 euros, un 11,42% más. En este caso, se trata de la cantidad más alta desde 2007, en plena burbuja, cuando se prestaban cerca de 189.000 euros por hipoteca. El tipo de interés medio se quedó en el 2,85%, lejos de los máximos por encima del 4% que se registraron en el ciclo alcista de tipos de interés, con una preferencia mayoritaria -un 60,6% de todas las concedidas- por el tipo fijo. De esta manera, el Principado alarga la racha de 15 meses al alza en todas las variables del mercado hipotecario, en máximos de más de 16 años.

La especulación, mayoritaria
La crisis residencial que sufre buena parte de la población catalana, especialmente los jóvenes que intentan acceder a su primera propiedad, se esconde tras los datos generales. Así lo detalla la asociación de usuarios de entidades financieras Asufin, que asegura que cerca de la mitad de las solicitudes de hipotecas se hacen con la inversión en mente. «Casi la mitad de los préstamos que se conceden son para comprar una segunda vivienda con el objetivo de invertir», concretan; mientras que menos del 16% se destinan a la adquisición de una primera residencia, y un 18% adicional se hipotecan para hacer un cambio de vivienda. El 18% accede a la financiación para tener una segunda residencia. Cabe decir que las cifras están dentro de la tendencia: si este año la inversión supone un 47,7% de las compras con hipoteca, anteriormente había llegado al 56,2%. Este movimiento puede responder a las nuevas dinámicas del mercado inmobiliario, que expulsa a muchos usuarios del segmento del alquiler y los obliga a acceder a la compra.

