La Agencia Tributaria de Cataluña recaudó 102,5 millones de euros en tasa turística entre abril y el septiembre del 2023, la considerada como temporada de verano. Se trata del impuesto liquidado por 40.000 establecimientos turísticos. Esta cifra es de récord, puesto que representa un aumento de un 165% respecto al mismo periodo del 2017. Este incremento se debe principalmente en la ciudad de Barcelona, donde desde el 2021 se cobra un recargo municipal. Solo Barcelona ya representa el 70% del total de la recaudación. La Costa Brava y Costa Dorada representan un 18%.
En cuanto a las comarcas, todas recaudan más en verano que en invierno excepto dos: la Cerdaña, que suma 5.000 euros más durante la temporada de esquí, y el Valle de Aran, que en suma 42.000 más. La Cerdaña, de hecho, sumó un total de 269.000 en tasa turística entre octubre del 2022 y el septiembre del 2023 y el Valle de Aran 186.000.

Las comarcas costeras recaudan mucho más en verano, con la excepción de Barcelona
En cambio, las comarcas costeras recaudan 8 de cada 10 euros en tasa turística durante la primavera y el verano, la temporada alta. Por ejemplo, el Baix Camp recaudó en verano un 86,2% de los 2,36 millones del total de la tasa turística. El Maresme (86,2%), el Baix Empordà (86,1%), el Baix Penedès y la Selva (84,9%) o el Tarragonès (84,7%) son otros ejemplos, como también lo son el Alt Empordà (83,1%), el Baix Ebre (82%) o el Montsià (81,1%).
En Barcelona, la diferencia entre el verano y el invierno es menos acusada. Dos terceras partes de los ingresos llegan en verano y el resto en invierno. La afluencia de turistas no es tan estacional como otras regiones de Cataluña. En todo caso, son las 12 comarcas costeras del país las que concentran el 96,8% del impuesto si se suman las temporadas de invierno y verano.