La llegada de la pandemia provocó que una parte muy importante de las familias empezaran a ahorrar a causa del confinamiento. Tres años después, este ahorro de las familias ya se ha acabado y los consumidores han optado por los créditos al consumo para mantener su ritmo de vida y, de este modo, sortear los aumentos de precios. En esta línea se pronunció el último informe del Banco de España sobre la materia, que confirmaba que el volumen del crédito al consumo creció considerablemente durante la primera parte del año.
Concretamente, durante el primer trimestre este tipo de préstamos aumentaron en 3.103 millones de euros en comparación con el año pasado, un 3,6% más, hasta los 95.294 millones acumulados hasta marzo. A la vez, los resultados de la gran banca española ya avisaban de esta posibilidad porque ante el descenso que están sufriendo las hipotecas en los últimos meses, los bancos han registrado un buen incremento en el negocio del crédito al consumo.
Desde el sector bancario, la situación se ve desde un punto de vista muy similar. El director de Financiación y Medios de pago del Banco Sabadell, Javier Gaztelu, explica a
Aun así, Gaztelu avisa que este aumento en la concesión de créditos todavía queda lejos de los datos del 2018, cuando se batió el récord, y apunta que continuará vigente mientras el ahorro generado entre el 2020 y el 2021 no se acabe del todo. De hecho, el directivo asegura que el porcentaje que se está financiando de las inversiones de los particulares todavía es muy bajo, según los datos que baraja el Sabadell.
Lo que sí que parece más extraño, o como mínimo menos habitual, es el aumento de los créditos en un clima macroeconómico de aumento de los tipos de interés, puesto que a excepción de la última reunión, el Banco Central Europeo ha ejecutado 11 aumentos de los tipos de forma consecutiva hasta colocarlos en el 4,5%. La respuesta a esto, apunta Gaztelu, es que esta subida de los tipos no se ha repercutido del todo a los créditos al consumo, hecho que provoca que todavía continúen pareciendo atractivos para los consumidores.
¿Créditos para comprar regalos de Navidad?
Ante esta circunstancia, el informe ‘Consumo en el golden cuarter 2023’ hecho por KPMG y Appinio apunta entre noviembre y el próximo enero, el conocido como golden cuarter, uno de cada cinco consumidores tiene previsto solicitar créditos de consumo y financiación para poder hacer sus compras durante esta campaña.
A pesar de que KPMG apunta a esta voluntad de los consumidores de destinar los créditos a los regalos de Navidad, Gaztelu apunta que la mayoría son para comprar coches o bien para pagar reformas, dos clásicos en este tipo de operaciones, pero descarta completamente que la gente los use para pagar los regalos. En este sentido, Gaztelu comenta que por ahora el importe medio de los préstamos es de 10.000 euros, y por eso confirma que se dedican mayoritariamente a inversiones familiares.
Por lo que hace específicamente a los regalos navideños, Gaztelu apunta que los clientes, como mínimo los del Sabadell, están optando más por las tarjetas de crédito o productos similares, puesto que sale más a cuenta devolver el dinero a corto plazo porque las cantidades no son tan elevadas para comprar los regalos como para comprar un coche. Ahora bien, estas compras masivas provocan que el diciembre es el mes con más facturación del año para el Banco, con un aumento del 20% respecto al resto del año gracias a las compras navideñas.
Endurecimiento del crédito
A todo esto hay que añadir que los bancos de la zona euro han vuelto a endurecer sus estándares crediticios durante el tercer trimestre y lo hicieron de una manera mayor de la esperada en todas las categorías de préstamos. Este hecho ha provocado que la demanda de préstamos y líneas de crédito de empresas y hogares a Europa haya caído, según compilación la última encuesta de préstamos bancarios elaborada por el Banco Central Europeo (BCE).
Concretamente, el informe del BCE señala que el porcentaje de entidades que aplicaron mayores restricciones aumentó en un 11% en el caso de las hipotecas y de un 16% en el caso de los créditos al consumo, un hecho que “superó con creces las expectativas anteriores”.
Los comercios, en contra
En caso de que los créditos se acabaran destinando a las compras navideñas, los comercios serían los principales beneficiados de estas operaciones. Ahora bien, el presidente de Pimec Comerç, Antoni Torres, considera que estimular las ventas a través de créditos solo beneficia a ámbitos concretos y a las grandes cadenas, que pueden ofrecer grandes descuentos. A la vez, apunta que endeudarse para ejecutar estas compras “tiene poco sentido” y asegura que el pequeño comercio ya se intenta adaptar a sus consumidores. En este sentido, recuerda que muchos comercios no han repercutido del todo los aumentos de precios para asimilarlos a la realidad que los rodea, un hecho que las grandes cadenas no hacen.
Además, Torres pone como ejemplo la compañera de Pimec Comerç ‘Batega’, que anima a los comercios tradicionales a cuidar mejor sus clientes durante estas semanas próximas a Navidad, pero sin ofrecer ningún tipo de descuento. De hecho, según los datos de la patronal del año pasado, los consumidores responden mejor al trato personal y próximo que ellos proponen en lugar de la política de grandes descuentos.
A la vez, Torres cree que el contexto inestable en el cual se encuentra actualmente la economía provocará que las familias frenen un poco su espíritu consumidor, hecho que provocará que los tickets medianos de compra de cara en estos próximos meses se reduzcan.