En el corazón del barrio de Horta, una torre abandonada esconde siglos de historia y misterio.
Conocida como la Torre del Moro, pocos barceloneses conocen su verdadero origen.
En Olost, en el corazón del Lluçanès, la histórica Fonda Sala combina cocina de caza y producto de campo con una estrella Michelin y un menú de 19 euros.