En la cocina moderna, la eficiencia, la funcionalidad y el espacio reducido marcan la diferencia. El nuevo mini horno de la marca SilverCrest llega dispuesto a ser el sustituto ideal con las mismas funciones y por un precio inferior, solo 47,99 €. Además, su tamaño está pensado para cualquier cocina. Y sí, cabe en tu encimera.
Las freidoras de aire causaron furor por permitir cocinar con poco o nada de aceite. Pero el paso del tiempo y la aparición de un electrodoméstico más eficiente han demostrado que aquello de “freír sin aceite” ya no es lo máximo que podemos conseguir. La tecnología avanza, los hábitos cambian… y nosotros queremos estar al día.
Diseño compacto que encaja en cualquier cocina
La gran ventaja de este mini horno es su tamaño de aproximadamente 40,5 × 27,0 × 34,0 cm y una capacidad de 14 litros. Que sea más pequeño no significa que cocine menos. De hecho, lo puedes usar para pizzas medianas, lasañas para 5–6 personas o para hornear un pastel en un molde de 30 cm de diámetro. Eso sí, si eres de los más golosos, ten en cuenta la capacidad, pero para la mayoría resulta perfecto.
Además, ocupa mucho menos que un horno convencional y se integra perfectamente en cocinas pequeñas o espacios secundarios. Si la premisa es “menos volumen, más utilidad”, este aparato lo cumple con creces.

Funcionalidad más allá de “freír sin aceite”
Las freidoras de aire fueron una gran revolución para reducir el aceite en la cocina. Pero este mini horno va más allá, porque no solo fríe, también hornea, asa, gratina y recalienta. Todo con precisión, gracias a sus modos de cocción ajustables: calor superior, inferior o ambos a la vez.
El rango de temperatura, entre 70 °C y 230 °C, permite adaptar la cocción a cada receta. Y como extra práctico, incorpora un temporizador de hasta 60 minutos más una función continua, perfecta para cocciones prolongadas o recetas delicadas.
En resumen, no estamos ante un aparato “menos” que la freidora de aire, sino ante un “más”.
Ahorro de tiempo y energía
Una de las razones principales para cambiar de electrodoméstico es el ahorro, tanto en la factura como en tiempo. Este mini horno tiene una potencia de 1300 W, lo que lo posiciona en un buen equilibrio entre rapidez y eficiencia.
A diferencia de muchas freidoras que requieren tiempos de precalentamiento y ajustes limitados, este horno distribuye mejor el calor y reduce los tiempos de cocción. Y lo hace sin disparar el consumo eléctrico, lo cual se agradece a final de mes.
Gracias a su sistema de calor combinado, los resultados son más uniformes e invertimos menos tiempo. No es necesario girar o repetir la cocción porque algo ha quedado crudo por dentro.
¿Qué se puede preparar con el mini horno? Los resultados sorprenden
Con este mini horno puedes preparar prácticamente cualquier receta doméstica. Hornea pizzas con base crujiente o pasteles que queden bien dorados y esponjosos, pero también puedes hacer carnes asadas y platos gratinados. Todo con ese toque de horno tradicional que la freidora no ha conseguido igualar.
Por ejemplo, si quieres gratinar una lasaña, solo tienes que activar el calor superior. Si necesitas cocción homogénea, utilizas ambos niveles. ¿Una pizza? Con el calor inferior queda perfecta. Es esta capacidad de adaptarse lo que realmente marca la diferencia.
Y lo mejor es que puedes cocinar para varios sin ocupar todo el espacio ni pasar horas frente a los fogones.
El momento de renovar ha llegado
Si decimos que este mini horno es “mucho mejor que una freidora”, no es solo por decirlo. Es más funcional, más eficiente, más compacto y más fácil de usar. Además, su precio es asequible, sobre todo teniendo en cuenta todo lo que ofrece.
Si estás pensando en renovar o simplemente mejorar tu rutina de cocina sin complicaciones, este es un paso lógico. Es el tipo de electrodoméstico que una vez lo pruebas, no quieres volver atrás.
Así que… ¿por qué quedarte con lo que es bueno cuando puedes tener algo mejor?