Arranca la primera jornada del Salón Internacional de la Logística, SIL. Durante los próximos tres días, centenares de empresas estarán expuestas en la Fira de Barcelona para demostrar que la logística es una parte importante del adelanto de la sociedad y un sector que siempre está en movimiento. «Si para la logística, para el mundo», ha explicado esta mañana el delegado especial del gobierno español al Consorcio de la Zona franca, Pere Navarro, durante el acto inaugural del congreso. Y es que autoridades gubernamentales y de entidades catalanas y españolas han coincidido al remarcar que el cambio de tendencia mundial hace que haya una necesidad muy grande de estar conectados y Barcelona es un muy buen punto de partida. Concretamente, el consejero de Empresa y Trabajo, Roger Torrent, ha explicado que «Cataluña bate récords de inversión extranjera y de innovación gracias a su buen sistema de conexiones».
El certamen, que prevé superar los 12.000 asistentes de la anterior edición, arranca hoy con más de 650 emprendidas participantes, un 40% de internacionalidad, la presentación de más de 150 innovaciones en exclusiva, más de 250 acontecimientos de expositores y la celebración de cinco congresos internacionales con 400 speakers y 144 sesiones, según ha remarcado el mismo congreso este miércoles. Tanta es la expectación que genera este acontecimiento, que el mismo Felipe VI celebraba su inauguración la noche antes del acontecimiento a la conocida Noche de la Logística. En este contexto, tanto el presidente como la directora general del consorcio, Blanca Sorigué recordaron la necesidad de un acontecimiento como este: «el SIL nació con una clara vocación internacional y la visión de reunir los mejores talentos en el campo de la logística».
Y es que las cifras no engañan y parece que la ciudad de Barcelona se puede convertir en el epicentro del cambio logístico, un viraje que quiere buscar la sostenibilidad medioambiental por encima de todo. De hecho, la misma ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha dicho durante el acto inaugural del congreso que «el Puerto de Barcelona será la lleva norte de entrada en España». Así pues, ella misma ha puesto mucho de énfasis en la necesidad de continuar invirtiendo en las infraestructuras y las conexiones. En total, la ministra ha expuesto que se han invertido alrededor de 2.300 millones de euros en las estructuras catalanas, es decir, el puerto y el transporte ferroviario. Una cifra que se divide en inyecciones directas de dinero y subvenciones. Sánchez, además, ha explicado que desde el gobierno español apuestan por el transporte marítimo y ha añadido que quieren que aglutine el 80% de las exportaciones e importaciones del estado español. «De este modo liberaremos las carreteras del alta contaminación actual», ha dicho la ministra.
El poder de la logística en el cambio cultural
Si Cataluña tiene el potencial para ser un centro logístico, Barcelona es el epicentro. En este sentido, la capital catalana está muy concienciada en la necesidad del cambio de modelo logístico, puesto que continúa siendo muy contaminante. En esta misma línea, la teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Laia Bonet, ha explicado durante la inauguración del SIL que «la administración tiene que liderar el cambio». Así mismo, Bonet ha expresado que hacen falta medidas más eficientes en términos de logística y que el sector público tiene que trabajar con el privado para encontrar las conexiones para hacerlo posible. Además, ella ha descrito como la situación no es solo un problema de las empresas, sino de la cultura de los ciudadanos. «Tenemos que hacer pedagogía», ha dicho la teniente de alcalde, haciendo referencia a abandonar la necesidad social de recibir paquetes rápidamente, una práctica que acaba siendo muy contaminante.
Con todo, el congreso espera obtener una asistencia récord y continuar avanzando hacia la sostenibilidad de un modelo logístico que cada vez puerta más problemas de contaminación. Tal como han insistido las autoridades, es necesario trabajar de manera conjunta para que el modelo logístico mundial no solo sea más eficiente, sino que esté más concienciado con el cambio climático.
